Cuando nos hablan de la vida espiritual, los cristianos nos hallamos en un conflicto. No logramos entender que nuestro anhelo de ser un "ser espiritual" y "andar en el Espíritu", debemos estar ligados a los ámbitos espirituales (donde pertenecemos).
"Andar en el Espíritu" no es una forma de expresar nuestro comportamiento, sino el reflejo de nuestro actuar y como hijos de Dios de nuevo nacimiento, debemos mostrar nuestra característica de seres espirituales, toda vez que pertenecemos al Reino Espiritual.
- Hebreos 11:13-16 (RVR1960)
13 Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra.
14 Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria;
15 pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver.
16 Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.
- Romanos 8:16 (RVR1960)
El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.
- 1 Corintios 2:14 (RVR1960)
Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
- Juan 3:31 (RVR1960)
El que de arriba viene, es sobre todos; el que es de la tierra, es terrenal, y cosas terrenales habla; el que viene del cielo, es sobre todos.
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