¿Has notado que en medio de las situaciones más complejas, como una deuda, nos acercamos más a Dios?
Desafortunadamente, hemos sido educados a solo agradecer al Señor por las cosas buenas e ignoramos el resultado de un tratamiento de tribulación.
La actitud de un cristiano verdaderamente conviccionado ante los problemas puede ser de agradecimiento y gratitud, siempre que entienda que la mano de Dios se mueve en su situación.
Te invitamos a escuchar esta palabra que nos ayudará a estar cada vez más cerca del Padre con una actitud de alabanza continua, a pesar de cualquier situación.
No trates de resolver tu problema por tí mismo, busca al Señor.
No trates de resolver tu problema por tí mismo, busca al Señor.
Comentarios
Publicar un comentario